Mañana es para siempre

Rebeca Sánchez (bajo la identidad de Bárbara Greco) comienza una venganza contra la familia Elizalde dirigida por el medio hermano del jefe de la familia Gonzalo Elizalde. Una de sus primeras villanías consiste en separar a Fernanda que es la hija menor del hacendado Gonzalo Elizalde, propietario de una importante empresa de lácteos, y Eduardo, el hijo de Soledad, el ama de llaves de la familia Elizalde. Los dos niños han crecido juntos y unidos por un amor inocente y leal, a pesar de la diferencia de clases sociales.
Bárbara no solo concentrara su maldad en Fernanda y Eduardo, también lo hará con Santiago y Aurora (Ariadne Díaz), con la ayuda de Camilo, el hermano de Santiago, Bárbara se hace amiga de Aurora para que esta le cuente la verdad de su vida, ya que Bárbara ve a Aurora como una espía de Artemio Bravo y decide con la ayuda de Camilo drogarla para que así Camilo pueda abusar de ella (la cual estaba embarazada de Santiago) y hacerle creer a Santiago que Aurora huyó con otro hombre.
Bárbara no solo concentrara su maldad en Fernanda y Eduardo, también lo hará con Santiago y Aurora (Ariadne Díaz), con la ayuda de Camilo, el hermano de Santiago, Bárbara se hace amiga de Aurora para que esta le cuente la verdad de su vida, ya que Bárbara ve a Aurora como una espía de Artemio Bravo y decide con la ayuda de Camilo drogarla para que así Camilo pueda abusar de ella (la cual estaba embarazada de Santiago) y hacerle creer a Santiago que Aurora huyó con otro hombre.
Bárbara tiempo después se da cuenta de que Aurora es su hija y ahora su lucha es para que no le quiten a su hija y para eso amenaza a Eduardo diciendo que si Santiago no se va de nuevo a Florencia va a matar a Liliana. Bárbara le inventa muchas mentiras a Aurora para que no sea feliz con Santiago ya que lo considera una amenaza por ser el progenitor del hijo de Aurora.
Después de muchas intrigas y mentiras, se va descubriendo poco a poco la verdad. Bárbara intenta matar infructuosamente a Gonzalo. Bárbara queda derrotada y planea huir con Aurora, pero esta rechaza la maldad de sus padres: Artemio y Rebeca/Bárbara. Artemio se burla de Rebeca y es asesinado por Bárbara, a quien la condenan a más de 200 años. En la cárcel Bárbara noquea a la doctora, después de hacerse la sedada, y se quema con alcohol para inspirar lastima en su hija. Queda deformada y sola en la cárcel, con el único consuelo de una carta de su hija. Aparentemente, nunca se arrepintió.La familia Elizalde se reconstruye. Fernanda y Eduardo se casan. Y Aurora y Santiago se reconcilian y forman una familia junto al hijo de ambos.